Fuegos sagrados y panes embrujados: Claviceps purpurea {SPP 079}

Como un espíritu burlón, el cornezuelo siembra desconfianza a su paso.No te fíes de su aspecto, que tan pocas pistas da sobre su verdadera naturaleza. No te fíes de su condición parásita, que esconde ventajas imprevistas para sus víctimas. No te fíes de su aparente inocuidad, que castiga al mamífero incauto con dolor y muerte. No te fíes de su invisibilidad en las fuentes históricas, que refleja nuestra ignorancia pretérita, más que su verdadera relevancia para las gentes de antaño.El hongo que la taxonomía conoce como Claviceps purpurea ha sido un jugador silencioso en la historia mundial hasta que, en los últimos siglos, no solo hemos hallado en él a una causa de enfermedad, muerte y sanación, sino también una clave de interpretación para releer el pasado. Maestro de bioquímica despiadada, el cornezuelo del centeno ha sido invocado como causante de epidemias y acusaciones de brujería, así como de haber participado en el culto mistérico más importante de la antigüedad clásica.Vamos a tirar del hilo (o de la hifa, mejor dicho) para ver hasta dónde nos llevan los secretos, tan fascinantes como peligrosos, que esconde el cornezuelo…+ Número de la Revista PAN con artículo sobre el cornezuelo del centeno: https://revistapan.com/producto/revista-pan-15-primavera-2023/ ☛ NUEVO libro, La consolación de la clorofila: escucha la introducción leída por mí, aquí: https://www.patreon.com/posts/te-leo-la-de-mi-81806132 https://www.ainaserice.com/consolacionclorofila.html ☛ Libro basado sobre las primeras temporadas del pódcast, Senderos de savia: https://ainaserice.com/senderosdesavia + Encuéntrame en la web https://ainaserice.com & en redes (IG: https://instagram.com/ainaserice).+ Para unirte a mi maravillosa familia en Patreon, con agradecimientos extra ☛ https://patreon.com/ainaserice+ Enlaces (y algunas transcripciones en abierto) de los capítulos en ☛ www.senda.imaginandovegetales.com {Agradecimientos} Música compuesta &interpretada por Cristina Llabrés y Evaristo Pons.¡Y gracias a ti por la compañía!